viernes, 28 de agosto de 2020

Calle Benitas

(Foto Cojo)

EL TRISTE CAMINAR HACIA PONIENTE
José Luis Miñambres

¿De dónde llegará este caminante, con el brillo de sus pasos en la tierra, en el barro desconsolado y brillante? Desde los campos del Este, a buen seguro, con el sol naciente a sus espaldas y el lodazal de sus pies y de su suelo. Más lejos, tal vez, piensa en paisajes viejos de la memoria, lejanos acaso: la Ermita del Otero, secular en su sombra, entre Palomares y Terradillos. Y más lejos, hacia Poniente, la eterna Mesa de Carpio y su castillo de Bernardo.
Sus pasos, su soledad y, tal vez, su tristeza, le han traído hasta las aguas del Tormes, con los restos de la muralla del Alba antiguo, soñando todavía. Y, sobre ella, la hermosura vegetal del Espolón, recinto floral, inmarcesible y eterno. Avanza el caminante en su desolación hasta el corazón urbano de la villa ducal, tan marcado por restos de lo histórico. Y en su caminar hacia el Oeste, ha cerrado sus pasos en la calle, dos edificios coinciden en su camino: a la izquierda, los monumentales sillares del muro, protegen la puerta del convento de Dueñas y sus recias columnas, alma de tantos sucesos del corazón de las pocas monjas que allá quedan. A la derecha de la calle, se mantiene el muro isabelino, recinto actual para la formación de mentes juveniles.
¿Hacia dónde se dirige el caminante? Ha dejado sus pasos y busca otro destino, entre los muros de la villa.  A lo mejor llega por la carretera de Aldeaseca, buscando otros caminos. O acaso… recorra la carretera de Garcihernández, tan lejana. O quizá recuerde Amatos, con sus Rolladales y Arapiles y con la belleza de desoladas y viejas alamedas.
Todo mientras el tiempo pasa… Y se van muriendo los recuerdos. Y, al final, solo el pensamiento del viajero, con toda su tristeza. 

viernes, 21 de agosto de 2020

Seudónimos de Luis Bello

Incorporamos hoy a nuestra sección de Prensa histórica un artículo, publicado el 1 de agosto de 1925 en la revista ilustrada La Esfera, relativo a uno de los grabados del antiguo castillo de Alba realizado por Jenaro Pérez Villaamil.

El artículo es obra de Martín Baile, una firma que posiblemente nos resulte desconocida, aunque en realidad no lo es tanto ya que se trata de uno de los seudónimos utilizados por Luis Bello Trompeta, un prestigioso político, escritor y periodista albense, aunque con una escasa relación con esta tierra de Alba que le vio nacer y de la que se ausentó en su niñez como consecuencia del traslado de su padre, hasta entonces promotor fiscal de Alba de Tormes.

No fue este seudónimo –formado por los segundos apellidos de sus padres: Juana de la Concepción Trompeta Martín y Francisco Bello Bayle– el único que utilizó. También firmó otros artículos como A. de Tormes, Álvaro de Tormes, o con sus iniciales L.B.; aunque lo cierto es que la gran mayoría de ellos fueron suscritos con su personalidad real: Luis BELLO.



viernes, 14 de agosto de 2020

Presidiendo nuestra Plaza Mayor

Hace unos días propinamos la localización de un medallón con el que podíamos encontrarnos en nuestros desplazamientos por Alba de Tormes y más concretamente por su Plaza Mayor donde se encarama a uno de sus edificios modernistas. 

Para aquellos que no lograron identificarlo, ahí va la solución:


viernes, 7 de agosto de 2020

Transparencia municipal 2020

51 puntos, sobre una valoración máxima de 53, alcanza en este mes de agosto el índice de transparencia municipal de nuestro ayuntamiento; curiosamente los mismos con los que se finalizó el pasado año, aunque esperamos que al término de este se alcancen de nuevo los 53 ya logrados en los ejercicios 2016, 2017 y 2018.

Llama la atención que a estas alturas del año únicamente 3 ayuntamientos –Alba, Terradillos y Castellanos de Moriscos– obtengan una valoración positiva en este portal de transparencia cuyo objetivo es facilitar el acceso a todos los ciudadanos para que puedan estar informados sobre la gestión y utilización de recursos públicos en las entidades locales.