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miércoles, 15 de noviembre de 2023

Alba de Tormes y su historia

«A la vez invitamos al turista a visitar nuestras bellezas que pasan desconocidas para la generalidad de los visitantes, porque apenas terminan de ver las reliquias de Santa Teresa, emprenden viaje de regreso ignorando que en Alba de Tormes hay mucho más que ver y admirar.» 

Con estas palabras incitaba Ricardo Blázquez Gómez a nuestros visitantes a prolongar su estancia en Alba de Tormes desde las páginas de Alba de Tormes y su historia, un libro editado por él en el año 1994 que ya se encuentra disponible en nuestra Biblioteca digital y en el que, además de algunas aportaciones personales y profusas ilustraciones, realizaba un meticuloso compendio de numerosos datos históricos, monumentales y artísticos procedentes de anteriores publicaciones –algunas difícilmente accesibles por entonces– relacionadas con nuestra localidad.

jueves, 15 de septiembre de 2022

Reseña de Vázquez de Parga

Es esta una obra de Jacinto Vázquez de Parga y Mansilla publicada en 1885 bajo el título "Reseña Geografica-histórica de Salamanca y su provincia para uso de los colegios y escuelas de la misma” que como su propio nombre indica nos ofrece una sucinta descripción geográfica (tanto física como humana) e histórica de Salamanca y provincia. De ella hemos extractado los capítulos correspondientes a Alba de Tormes y sus tierras, que hoy incorporamos a nuestra Biblioteca digital donde permanecerá a disposición de cuantos quieran consultarla.

miércoles, 15 de junio de 2022

Alba de Tormes: Páginas sueltas de su historia

 De la composición y el devenir de distintos colectivos que, en distintas épocas, se desarrollaron en Alba: judíos, masones y carlistas; de las Coplas del perro de Alba y de las Coplas de Riscas y Capolo; del apostolado de la iglesia de San Juan, del antiguo palacio-castillo de Alba y de las murallas tras las que se amparaba; de Fernando de Araujo y su Guía histórico descriptiva de Alba de Tormes, un referente, sin duda, que nos aporta multitud de datos sobre nuestro pasado; y de los distintos periódicos y revistas  publicados en nuestra localidad, nos habla Jesús María García García en su obra Alba de Tormes: Páginas sueltas de su historia, en la que deja a un lado a los personajes más representativos con los que suele asociarse nuestra villa –sus duques y Santa Teresa– para describirnos otros aspectos de menor trascendencia ligados al acontecer cotidiano albense en distintas etapas de su intrahistoria.

jueves, 4 de marzo de 2021

Manual del peregrino

El título completo de este libro, que hoy recordamos fue Manual del peregrino para visitar la patria, sepulcro y parajes donde fundó la Santa, o existen recuerdos suyos en España. Se publicó en 1882 –año en el que se conmemoraba el Tercer centenario de la muerte de Santa Teresa– por encargo de la junta organizadora de la peregrinación madrileña a Ávila y Alba de Tormes, y en él su autor, el académico de la historia Vicente de la Fuente, ofrece al peregrino un sinfín de datos relativos a fundaciones, tradiciones, parajes, libros, cartas, reliquias, retratos,… relacionados con ella, en un volumen de casi 500 páginas de las que nosotros hemos extractado, además de las comunes a todos los lugares descritos, su capítulo VI dedicado a Alba de Tormes.

miércoles, 16 de diciembre de 2020

III centenario de la canonización de Santa Teresa de Jesús

Es este un pequeño opúsculo editado en Alba de Tormes en el año 1922, “como obsequio de amor y admiración reverente”, para conmemorar el tercer centenario de la canonización de santa Teresa.

El folleto en cuestión se limita, tras una ampulosa introducción, a unas breves pinceladas biográficas de la Santa y a la reproducción de uno de sus versos más conocidos, aunque no por ello deja de tener interés bibliográfico y, a buen seguro, despertará la curiosidad de muchos de nuestros seguidores, para quienes que ya se encuentra disponible en nuestra Biblioteca digital.

viernes, 4 de septiembre de 2020

Azulejería histórica de Alba de Tormes

La Consejería de Cultura y Turismo de la Junta de Castilla y León ha publicado dos tomos relativos a la azulejería histórica en algunas de las provincias de su ámbito territorial.

Ambos tomos son obra de Manuel Moratinos García; el primero de ellos –publicado en 2016–está dedicado a las provincias de Ávila y Valladolid, mientras que el segundo –publicado en 2019– abarca las provincias de León Zamora y Salamanca.

De este último hemos extractado los estudios correspondientes a distintos enclaves albenses antiguo castillo-palacio de los duques de Alba, convento de Santa Isabel, monasterio de San Leonardo, convento de la Anunciación y hospital de Santiago y San Marcos– en un documento que incorporamos a nuestra Biblioteca digital donde ya se encuentra disponible para su consulta y descarga.

Independientemente de esto, el Tomo I y la totalidad del II se encuentran accesibles en este enlace (clic aquí) que nos ha sido facilitado por Nacho Cotobal, a quien agradecemos las numerosas aportaciones viene realizando a este proyecto de dar a conocer la historia, la cultura y las tradiciones de Alba de Tormes y de sus gentes.


lunes, 14 de enero de 2019

El Fuero de Alba (Julián Sánchez Ruano)

No es esta la primera referencia que hacemos al Fuero de Alba. Ya hablamos de él en julio de 2011 (ver) cuando incorporamos la transcripción -desde castellano antiguo- realizada por Andrés García Manzano, y más tarde, en julio de 2017 (ver), al incluir la edición digital del estudio realizado por Américo Castro y Federico de Onís sobre los Fueros Leoneses (Salamanca, Alba de Tormes y Ledesma). Hoy volvemos a ocuparnos del primero y más importante de los documentos históricos que se custodian en el archivo municipal albense al incorporar a nuestra Biblioteca digital el capítulo dedicado a él por Julián Sánchez Ruano en su libro Fuero de Salamanca.


lunes, 16 de abril de 2018

Catálogo Monumental de Salamanca

El Catálogo Monumental de España surgió en 1900 como una iniciativa conjunta de la Real Academia de la Historia y el Ministerio de Fomento con la que se pretendía promover la publicación de un inventario sistemático que reuniese por provincias cuantas obras de interés artístico o histórico se hallaban dispersas por todo el territorio nacional.
Para llevarlo a cabo se designó al arqueólogo e historiador Manuel Gómez Moreno (Granada, 1870 – Madrid, 1970) quien elaboraría los catálogos de Ávila (1901), Salamanca (1903), Zamora (1904) y León (1906-1908).
El cambio de titularidad en la dirección de la Academia y del Ministerio daría al traste con el desarrollo de aquel proyecto –posteriormente retomado, aunque de forma incompleta– y retrasaría hasta 1925 y 1927 la publicación de los catálogos de León y Zamora y a 1967 el de la provincia de Salamanca, que lo haría en dos tomos, uno con textos descriptivos de las obras catalogadas y un segundo con fotografías de algunas de ellas.
De este último catálogo –el de Salamanca– hemos extractado los textos e imágenes correspondientes a Alba de Tormes refundiéndolos en un único archivo que, en formato pdf, incorporamos a nuestra Biblioteca digital.


viernes, 21 de julio de 2017

Fueros leoneses: Alba de Tormes

Ya hacíamos referencia al más antiguo de nuestros documentos en julio de 2011 cuando recogíamos la transcripción del castellano antiguo realizada por Andrés García Manzano, sobre el texto facilitado por Victoriano Sánchez Trapero, publicada en el libro programa de fiestas entre los años 1987 y 2005. Hoy incorporamos a estas páginas una nueva publicación histórica: El capítulo correspondiente al Fuero de Alba que hemos extractado de la Edición y estudio realizado por Américo Castro y Federico de Onís sobre los Fueros Leoneses (Zamora, Salamanca, Ledesma y Alba de Tormes) que fue publicada por el Centro de Estudios Históricos (Madrid, 1916).


viernes, 5 de mayo de 2017

Soñando en la ribera del Tormes


« […] Elementos claramente noventayochistas como la visión subjetiva e idealizada del paisaje albense; la inmersión, más que en la Historia, en la intrahistoria de Alba, en sus gentes, sus costumbres, en los hechos cotidianos; las referencias a la Literatura a través de determinados autores, son características que se pueden apreciar tanto en esta obrita [… ]»
(Ángel González Pérez).

De historia y de nostalgia, de rincones y de personajes ligados a Alba, del duque y de Teresa, de recuerdos y de paisajes, y del río… siempre el río como hilo conductor de sus vivencias y sus añoranzas, nos habla desde este libro –Soñando en la ribera del Tormes– José Sánchez Sánchez, otro más de esos albenses a los que el destino les alejó de su tierra pero con la que siempre mantuvo una estrecha relación.

martes, 15 de noviembre de 2016

Nueva semblanza en "Aquellos albenses de entonces"

PATROCINIO RUEDA SARDINA (1870 – 1945)

El señor Patro Rueda, junto a otro señor Patro, “El de la luz”, fue muy popular en Alba. Fue mi abuelo materno. El único abuelo que conocí. En mi opinión fue un bohemio con ribetes de romanticismo. Tuvo varios oficios: Sastre, conserje del Casino, interventor del Banco del Oeste de España, siendo director Don Francisco Sánchez Bordona, recaudador del impuesto sobre el consumo, empresario taurino, y un buen “escribiente” en el Registro de la Propiedad. –“Aquí hay muchos escritos de tu abuelo”– me dijo el señor Canete, Oficial Mayor de dicha oficina.
Fue gran aficionado a los toros, y amigo del vizconde de Garcigrande, que tuvo una ganadería de bravo, y de don Emilio Clavijo, dueño de otra ganadería de toros bravos, los cuales pastaban en su finca de Revilla, cercana a Martinamor, el pueblo que vio nacer en una feria de Alba al cantante Farina, y a Encinas de Arriba.
De él aprendí muchas cosas, y todas buenas. Recuerdo un consejo que no he olvidado: “No vayas nunca a la calle sin llevar al menos un duro en el bolsillo”. Tampoco olvidaré el siguiente refrán que oí de él: “Desde los tiempos de Adán, unos calientan el horno y otros se comen el pan”.
Todos los años nos regalaba a mi hermana Mary Paz y a mí un corderillo al que llevábamos a pasear hasta la Fuente del Santo, un manantial, hoy dentro de una finca particular, sito en el viejo camino de Amatos.
Todos los años, también, me llevaba, en la feria de Salamanca, a una de las cuatro corridas que se celebraban: Los días 12, 13, 14 y 21. Ese día sorteaban un “toro de oro” o 5.000 pesetas, a elegir. Un año le tocó a un albense, cuyo nombre no doy porque no me acuerdo. Si del apodo con que se conocía a toda la familia, no sea que les pareciera mal.
También me llevaba al “Empastre” y al Desenjaule de los toros que se iban a lidiar. Eso tenía lugar el ocho de septiembre, día –que si no recuerdo mal– comienza la feria de Salamanca.
Con mucha frecuencia nos llevaba a mi hermana y a mí a dar un paseo hasta una huerta que compró a un tal Pepe el Cabrero, sita entre una propiedad de la familia Perlines y otra que fuera propiedad del médico don Luis Acevedo. Mi hermana llevaba una cestita de mimbre de color rojo en donde guardaba las moras que íbamos recogiendo.
Antes he dicho que era mi abuelo muy aficionado a los toros y que me llevaba con él a una corrida. También me parece recordar, en una nebulosa, que me llevó alguna vez a presenciar los tentaderos en Revilla.
En mi poder tengo el programa de una corrida celebrada en Alba el 22 de octubre de 1932 en cuyo reverso dejó escrito, de su puño y letra, lo siguiente: “Primera corrida que presenció mi nieto José Sánchez Rueda. Alba 1932. A los dos años de edad.
Era poseedor de una biblioteca no muy extensa en cantidad, pero si en calidad. Allí leí, siendo aún un niño “Nuestra Señora de París”, “Los miserables”, “El conde de Montecristo”, “Los tres mosqueteros”, “Rocambole”, “Raflles el elegante”, “Del sentimiento trágico de la vida”, “Recuerdos de niñez y mocedad” (Unamuno), “Tratado de la perfecta casada” , “Los galeotes”, “Don Juan Tenorio”, y alguna de las obras de José Sánchez Rojas, amigo de mi familia.
Fue mi abuelo un hombre de buen carácter, con un dejo de tristeza. No me extrañaba. Su único hijo varón, Antonio, murió en la Batalla del Jarama en febrero de 1937. Conservo la medalla que se entregaba a los familiares del fallecido, en cuyo reverso está grabada la fecha del fallecimiento. En el anverso hay dibujada una torre rodeada con esta inscripción: “Sufrimiento por la Patria”.
Ahora vamos con una anécdota. Fue en los tiempos en que llevaba en arrendamiento el impuesto de consumos. Para vigilar por la noche solía darse un paseo por las afueras de Alba. Una noche, paseando cerca del cementerio, comenzó a llover. Para resguardarse de la lluvia se refugió en la puerta, que entonces era de madera. Encendió un cigarrillo y esperó a que cesara la lluvia. De repente sintió que daban unos golpes que procedían de dentro del cementerio. Mi abuelo, que de miedoso no tenía nada, acabó el cigarro y se fue a casa. A la mañana siguiente preguntó al sepulturero la causa de aquellos golpes. Era de una cabra que por la noche soltaba en el camposanto. ¿No te dio miedo? – le dije. Y él me contesto: “A los muertos no hay que temerlos, es a los vivos a quien hay que temer”.
Mi abuelo murió en marzo de 1945, después de una larga enfermedad que le dejó las piernas inmóviles y que le producía fuertes dolores. Mi madre, todo abnegación, le atendió con entereza. Fue una época difícil. Entonces no se llevaban, como ahora, las sillas de ruedas y era grande el esfuerzo de ella para llevarlo de la cama a una mesa camilla donde pasaba las horas. ¡Dicen del sexo débil! De eso nada. Las mujeres tienen un espíritu de sacrificio del que carecemos los hombres. ¡Si nosotros tuviéramos que dar a luz, el mundo se quedaría vacío! Él llevó la enfermedad con resignación. A veces se ponía a canturrear alguna canción, siendo una de sus preferidas aquel famoso tango de Carlos Gardel que empezaba así. “Todo está en silenció, la noche está en calma, el músculo duerme, la ambición descansa”.
Todo cuanto estoy diciendo ocurrió en aquellos años confusos de la Guerra Civil y postguerra, en que vivir tranquilo era difícil: Hambre, cartillas de racionamiento… En mi familia fuimos tirando gracias a mi padre, a quien no le faltaba trabajo en su carpintería, pero hubo gente que las pasó canutas. Acabada la guerra “incivil” –dijo Unamuno– empezó la Segunda Guerra Mundial por culpa de aquel loco llamado Hitler, y las cosas siguieron poco bien.
Un día que hablábamos de la guerra, le leí unos versos que venían en los libros de bachillerato. No recuerdo al autor, si a los versos:


“Con esta ametralladora,
dice el sabio Sisebuto,
mil disparos por minuto
y sesenta mil por hora.
¿Qué gloria será la mía
si esta máquina potente
llega a matar buenamente
un millón de horas al día?
Proclamarán su bondad
en las más remotas tierras
y así acabarán las guerras
y también la humanidad”
Mi abuelo asintió.

Y esto es todo. Con este trabajo añado una semblanza más a “Aquellos albenses de entonces”.

José Sánchez Rueda
Almería, Octubre de 2016

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Desde hoy actualizamos, con esta nueva semblanza, el libro de este mismo autor alojado en nuestra Biblioteca digital.

lunes, 11 de julio de 2016

El castillo de Alba de Tormes

Titulado El Castillo de Alba de Tormes, este documento que hoy incorporamos a nuestra biblioteca digital se publicó en el año 1962 y aunque en él no figura su autoría, nos atrevemos a atribuirla a la Casa de Alba o, incluso, a Luis Martínez de Irujo y Artacoz –duque consorte de Alba–  pudiendo tratarse de un resumen, o de  un esbozo, de su discurso de ingreso en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando que bajo el epígrafe «La Batalla de Mühlberg en las pinturas murales de Alba de Tormes» fue leído en la recepción pública de la Academia del día 18 de marzo de ese mismo año de 1962.
 En cualquier caso, se trata de una curiosa monografía en la que, además de una escueta historia de la evolución del castillo,  de una somera biografía del Gran Duque de Alba y de una descripción de las pinturas de la torre de la Armería, contiene una interesante colección de láminas relacionadas con este enclave histórico.

Documento facilitado por Asunción Martín Gómez y Juan de la Cruz Soto Martín

lunes, 13 de junio de 2016

Francisco Soto del Carmen

«Alba de Tormes –este remanso de paz, este hondo lago de espiritual sosiego en que estamos– es la tierra bendita en la que viví durante varios años. Respirando su luz. Bebiendo sus paisajes. Abismándome en su transparencia. Cantando, por obra y gracia de su serenidad, sus piedras, sus hombres y sus tierras.»
(Francisco Soto del Carmen)

Aunque nuestro objetivo fundamental es la difusión de la historia la cultura y las tradiciones de Alba de Tormes y sus gentes, no por ello dejamos de ocuparnos de otros personajes de relevancia que, sin haber nacido en esta localidad, han mantenido una relación directa con ella.
Tal es el caso de Francisco Soto, del Carmen en la poesía,  Bartolomé en el mundo, de Santa Teresa en religión, (Villada, Palencia, 1933 – Salamanca, 1988), un poeta unido la villa por haber estado destinado en el convento de Alba –como religioso de la Orden del Carmen Descalzo– entre los años 1968 y 1970 y por su posterior matrimonio con una albense tras su secularización y el consiguiente abandono de la orden carmelitana.
Fundador –junto a otros– de la Unión Artística Vallisoletana y colaborador de las revistas Élica, Más allá, Álamo, Tela de araña, Uriel,… su labor literaria fue reconocida con la concesión de los premios  “Sarmiento”, “Juan de Baños”, “Ciudad de Valladolid”, "Gerardo Gombau. A la música por la poesía", Nacional de Poesía “Ademar”,  y Nacional de Poesía "Botón Charro". 
Su obra, buena parte de ella inédita, fue cedida por sus herederos – Asunción Martín Gómez y Juan de la Cruz Soto Martín (esposa e hijo del poeta)– a la fundación vallisoletana Jorge Guillen, donde se conserva a la espera de su catalogación y digitalización, y quien promovió, en el año 2007, la edición de “Poesía”, un volumen que compendia la obra de Francisco Soto del Carmen publicada hasta entonces (¡Apuntalad el aire! –1981–, Cántico para un amor y una ausencia –1986–, La ciudad en brasas –1991–, Leve pétalo apenas –1993–).
Nosotros, en un modesto intento de contribuir al conocimiento de su poesía, hemos realizado una recopilación de algunos de sus poemas que, con el título Alba y Teresa, desde hoy se encuentra disponible en nuestra biblioteca digital.


martes, 19 de abril de 2016

Aniversario del nacimiento de Sánchez Rojas

Nada mejor para recordar a José Sánchez Rojas que hacerlo a través de su obra. Por ello, y para conmemorar el 131 aniversario de su nacimiento, acaecido un 19 de abril –como hoy– del año 1885, hemos confeccionado un pequeño compendio de algunos de sus artículos inspirados –o dedicados– a diversas localidades de nuestra provincia que bajo el título Correrías salmantinas ya se encuentra disponible para su consulta y/o descarga. 

lunes, 8 de septiembre de 2014

Recuerdos y esperanzas

«Efectivamente, casi todos sus trabajos, bajo la simple apariencia de romántica descripción, transmiten la reflexión del alma.» (Jesús María Corredera Martín)
«Tampoco escasean en esta obra las vivencias personales, la meditación sosegada y profunda que ha ido reposando como un buen vino en largas horas de paseo…» (Andrés García Manzano)
De Alba de Tormes, de su entorno y de otras cosas nos habla Pepe Rueda y lo hace con un estilo sencillo, en ocasiones nostálgico, espontaneo siempre, en unos artículos sueltos escritos en distintos lugares y en distintas épocas y recopilados por su autor en este libro, Recuerdos y Esperanzas, que desde hoy enriquece los fondos de nuestra biblioteca.


lunes, 7 de julio de 2014

Descripción y Guía de la Villa Ducal de Alba de Tormes

«D. Fidel Criado, que así se llama el novel autor, es el poeta más insigne de todos los mozos de café y el mozo de café más insigne de todos los poetas»
(José Sánchez Rojas. Gente Joven 01-03-1905)
Supe de ella por un artículo publicado en marzo de 1905 en el semanario salmantino Gente Joven e inmediatamente me propuse la tarea de localizarla. En un principio los resultados fueron desalentadores y mi búsqueda en archivos, bibliotecas y librerías de viejo siempre resultó infructuosa. Recurrí también a descendientes de su autor -algunos, incluso, desconocían su existencia- y tampoco obtuve logro alguno. Finalmente, y cuando parecía haberse perdido todo rastro de ella se me presentó la oportunidad de contactar con Victoriano Sánchez Trapero, celoso conservador de importantes documentos relacionados con nuestra localidad, quien, efectivamente, disponía de un ejemplar –con dedicatoria a su padre incluida– que no dudó en ponerlo a mi disposición para compartirlo a través de este cuaderno electrónico.

La guía contiene un escueto prologo del escritor y periodista albense José Sánchez Rojas y en apenas ocho páginas propone un superficial recorrido por algunos de los lugares más interesantes de la villa, a la que describe brevemente, sin profundizar demasiado en su pasado histórico o en su interés artístico. Se trata, pues, de un curioso opúsculo, con mayor valor testimonial que literario o informativo, escrito en 1904, al que su escasa difusión y el transcurso del tiempo relegaron al olvido.

Su autor, Fidel Criado Miguel -alias Machaquito- fue un sugestivo personaje del primer tercio del siglo XX albense, merecedor, quizás, de un mejor y más amplio estudio. Soldado en la guerra de Cuba, camarero, obrero en la Basílica, celador de Telégrafos, presidente de asociación de danzas charras de Alba de Tormes… sus inquietudes culturales y literarias le llevaron a escribir algún que otro apropósito teatral, diversos artículos y crónicas periodísticas y esta Guía que, al incorporarla hoy a nuestra biblioteca, rescatamos para cuantos en ella estén interesados.

viernes, 30 de mayo de 2014

El motín de Alba

«El tupido velo de silencio que cayó sobre estos acontecimientos no nos exime  ahora de llegar hasta las raíces de lo acontecido. Este derecho a saber la verdad de aquello […] es lo que nos ha movido a realizar este estudio, basándonos sobre una sólida base documental, y convencidos de que hacíamos un servicio no sólo al teresianismo, sino además a la historia local de la villa de Alba de Tormes…»
Manuel Diego Sánchez (OCD)


Superadas ya las primeras conmemoraciones de IV centenario de la beatificación de Santa Teresa, parece el momento adecuado para tratar el más notable de los acontecimientos ocurridos cien años atrás, cuando se recordaban los trescientos de esta misma efeméride y Alba de Tormes se engalanaba y recibía con júbilo a multitud de peregrinos que inundaban sus calles de fervor teresiano.

Nos trasladamos, por tanto, a 1914, y más concretamente a los días comprendidos entre el 16 y el 28 de agosto, periodo en el que se desarrollaron una serie de sucesos que conmocionaron a la población albense y que, grosso modo, consistieron en la apertura, en privado, del sepulcro de Santa Teresa por parte del General de la Orden del Carmen Descalzo y otros miembros de la congregación carmelitana y un algarada popular que forzó una segunda apertura y la exposición pública de los restos de la Santa.

Curiosamente estos incidentes no tuvieron una repercusión acorde a su relevancia y fueron escasamente tratados, cuando no olvidados, por la mayoría de los medios de comunicación de la época. No obstante, quedaron grabados en la memoria colectiva albense y rememorados, dependiendo del particular punto de vista de cada uno, como una proeza del pueblo en defensa de la permanencia en la villa de la más importante de las reliquias teresianas o como un hecho lamentable  y vergonzoso que nunca debió haberse producido¹.

Para esclarecer aquellos sucesos, para aportar luz sobre lo realmente ocurrido, Manuel Diego Sánchez publicó en el año 2005 un exhaustivo y documentado estudio bajo el título La última apertura del sepulcro de Santa Teresa y los acontecimientos sucedidos en Alba de Tormes (Agosto 1914) en el que, desde su óptica carmelitana, profundiza en las circunstancias que concurrieron en aquellos días y en las personas que participaron y fueron testigos de unos hechos que la mayoría de nosotros solamente conocíamos gracias a la versión, más o menos distorsionada, que nos contaron de niños.

Se trata pues de una publicación fundamental, que hoy incorporamos e nuestra Biblioteca digital, en la que podemos encontrar la documentación e información necesaria para interpretar de una manera correcta y objetiva un retazo de nuestra historia.

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¹ Esta dualidad en la interpretación del suceso volvería a producirse 68 años más tarde cuando durante la conmemoración del V Centenario de la muerte de Santa Teresa (1982) -¿que tendrán los centenarios teresianos?- se produjo un nuevo tumulto, en esta ocasión contra el autodenominado Papa Clemente.  


jueves, 6 de febrero de 2014

Una página en la vida de Lope de Vega: Alba de Tormes

Obra publicada en 1978 por la extinta Sociedad Amigos de Alba en la que su autor –Julian Moreiro– reproduce, con ligeras variaciones,  su trabajo titulado Lope de Vega, poeta oficial de la Casa de Alba que resultaría galardonado con la Pluma de Oro en el III certamen literario Pluma de Santa Teresa celebrado en el año 1977.
Se trata, sin duda, de un libro imprescindible en la biblioteca de todos los que se sienten seducidos por Alba de Tormes y por  su historia en el que Moreiro nos acerca a la época del destierro del Fénix de los Ingenios y, especialmente, a su etapa al servicio de Antonio Álvarez de Toledo -V duque de Alba- y a los años en los que el poeta residió en la villa tormesina  (1591-1595) cuyo antiguo esplendor comienza ya a declinar cuando el siglo XVI se aproxima a su final.


Publicaciones relacionadas:
    - Julián Moreiro: Pluma de Oro 1977

martes, 7 de enero de 2014

Nomenclátor de Floridablanca

Rio–al–Mar, Cantalvérque y Allende el Rio constituían los tres cuartos en que se dividía el Partido de Alba de Tormes en la segunda mitad del siglo XVIII según se detallan, junto a sus núcleos de población, en el Nomenclátor de Floridablanca donde se recoge la organización territorial de la España de la época.

Publicado en el año 1789, fue realizado por iniciativa del rey Carlos III y elaborado por su Secretaría de Estado bajo la dirección del conde de Floridablanca (de ahí el nombre por el que es conocido).

Hoy lo incorporamos a nuestra biblioteca después de haber extractado aquellas páginas que contienen información concreta referida a nuestra localidad (pág. 99 y 135 del pdf) así como otros contenidos generales que nos permiten hacernos una idea de la magnitud de la obra y comprobar algunos datos que, a día de hoy, pueden resultarnos curiosos, tales como la existencia de provincias como la Toro o, más próximo a nosotros, la adscripción territorial de la cercana villa de Peñaranda de Bracamonte a la provincia de Ávila. 


viernes, 14 de junio de 2013

Senda Emocional de Alba de Tormes

Tú que fuiste poeta de cadencias,
de la Madre Teresa cancionero
y de Alba de Tormes su vocero,
¿por qué calló tu lira, tus ausencias?

Quebrarán el silencio de vivencias
de tu amor Teresiano tan sincero
y el lema de “Morir porque no muero”
será el crisol que aflore tus esencias.

Álamo Salazar, ¿porqué te fuiste
sin coronar el Cuarto Centenario
de la Santa más grande del Carmelo?

Me parece que, tú, ya lo dijiste:
Para ser de Teresa es necesario
subir con ella hasta su mismo cielo.


Marcelo Ángel Galán Pérez.
Diciembre de 1981

No podía faltar en un espacio como este, en el que intentamos aglutinar las inquietudes culturales relacionadas con Alba de Tormes, una reseña dedicada a Antonio Álamo Salazar (1921 – 1981), ni estaría completa nuestra biblioteca si no contase entre sus fondos con una obra de este periodista, escritor y poeta cuya dimensión intelectual y literaria marcó una época en Alba de Tormes.

Tampoco pretendemos aquí un exhaustivo análisis de su persona o de su obra -ambas ya suficientemente estudiadas por José Carlos Briñón en su libro Solo en ti yo bebo poesía (Diputación de Palencia, 2008) al que remitimos para un conocimiento más pormenorizado-, sino trazar unos breves apuntes biográficos de este albense nacido en Pozaldez (Valladolid) que supo compaginar su labor pedagógica como maestro nacional con su pasión por la poesía y el periodismo participando, y obteniendo importantes galardones, en múltiples certámenes literarios y colaborando asiduamente con distintas publicaciones (El Diario Palentino -del que llegaría a ser Director-, ABC, El Adelanto de Salamanca…) y emisoras de radio (La Voz de Palencia, Radio Nacional de España…).
Cronista Oficial de Palencia y de la Villa de Alba de Tormes -de donde fue nombrado hijo adoptivo (16-10-1954)-, participó en el grupo de trabajo de educación de la UNESCO en España así como en la Institución Tello Téllez de Meneses de Palencia, como académico de número, y en la Real Academia de Bellas Artes de la Purísima Concepción de Valladolid, como académico correspondiente, dejándonos, tras su fallecimiento, un legado literario -en gran parte inédito- del que aquí rescatamos  la que posiblemente fuese su obra más querida, Senda emocional de Alba de Tormes, guía sentimental y poética editada en 1952 y nacida de una pluma que conocía, sentía y amaba a su pueblo y a sus gentes.