Transcurridos ya unos años desde la edición a cargo de la Diputación Provincial de Salamanca de su primer volumen, y dado que su publicación impresa no parece tener continuidad, presentamos hoy la edición digital de la totalidad de las Obras completas del escritor, traductor y, por encima de todo, periodista José Sánchez Rojas.
No ha resultado sencilla su elaboración. La dispersión de sus escritos diseminados en multitud de cabeceras periodísticas ha sido, posiblemente, la dificultad más compleja a la que nos hemos enfrentado. Durante su preparación hemos tenido que consultar en infinidad de hemerotecas y bibliotecas, tanto físicas como digitales, la prensa escrita de un periodo de 30 años –los que van de 1901 a 1931–, para localizar en alrededor de 175 periódicos y revistas cerca de 3.000 colaboraciones suyas –algunas de ellas repetidas–, y, finalmente, compilar los más de 1.950 artículos que, además de su producción bibliográfica, sus prólogos a obras de otros escritores, sus preámbulos a algunas de sus traducciones de autores italianos, y una parte de su correspondencia epistolar, componen los 6 Tomos en que se estructuran.
En definitiva, una laboriosa tarea a la que tanto mi compañero Jesús María García como yo nos hemos dedicado de manera totalmente altruista, que hoy culmina con esta edición digital que ya se encuentra disponible en la sección que a ellas dedicamos en este cuaderno electrónico y en la página web del Ayuntamiento de Alba de Tormes –a quien las hemos cedido desinteresadamente y donde consideramos imprescindible su presencia– y que también ofrecemos a todas aquellas otras (institucionales, culturales, académicas…) que pudieran estar interesadas en acogerlas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Las opiniones aquí reflejadas corresponden a los comentaristas y no representan, necesariamente, las del autor de Entre el Tormes y Butarque, quien se reserva el derecho a eliminar aquellos comentarios que considere inadecuados, bien por utilizar un lenguaje indecoroso, emplear descalificaciones personales, ser repetitivos o introducir argumentos al margen del tema de debate.
En caso de que no desee revelar su verdadera identidad se sugiere que utilice un alias o nombre ficticio, lo que agilizará el debate y permitirá identificar claramente la autoria de las opiniones que quieran ser rebatidas o corroboradas por otros comentaristas.