lunes, 14 de septiembre de 2015

A propósito del traslado del párroco.

Polémica ha resultado la decisión episcopal de trasladar a la vecina localidad de Peñaranda de Bracamonte a Lauren Sevillano. Al menos eso parece a tenor de los comentarios recibidos al respecto (algunos de los cuales no han sido publicados por resultar por completo improcedentes o por acusar, desde el anonimato y sin prueba alguna, a determinados  particulares de incitar este cambio de destino).
En relación con ello, y sin ánimo de avivar la polémica, presentamos hoy un escrito que, con el ruego de su publicación, nos remite una seguidora de esta página en el que, no sin cierta dosis de humor, manifiesta su protesta por el traslado del párroco albense.


CARTA PAL SEÑOR OBISPO
Mu güenos días señor Obispo tenga uzté:
Espero qal recibo e la presente ande uzté bien. Yo ar momento bien grasias a Dios.
Lezcribo a uzté pa indicirle qando mu esgustao porque menterao que quita daqui, destos pueblos y dAlba al señor cura, el señor Lauren, y la notisia no ma gustao na, pero na de na, porque es un cura mu majo, pero que mu remajo, qami y más gente nos ayudao, y ya vamos a la misa, y en cuantis habla ice cosas mu bonitas que tos entendemos porque las ice pal pueblo. Y las entiende mu rebién el qastudiao y el que nastudiao, y tos indicimos que señores curas como el señor Lauren son los qacen falta.
Mieuzté si enserá güeno, que no tie na pael, que to lo da, y lo que no da se lo roban, que ya lan quitao dos paratos telefónos al escuido y por confiao, en mientras iba an busca e lemosna, qhay gente mu mala iesagraesia. A nuestro cura (nuestro porque lo qamamos es e nuestra propiedá), el señor Lauren, lo mismo se sube a un tejao parreglar goteras y que no le cuesté na a la Iglesia, qhase bodas, y to lo demás qhacen los otros curas. O sea qhase de to: de cura, dhombre, dhermano, de to, que vale el solo más que muchos juntos. No sastá quedo nunca pair ayudar al nesesitao, y a los qandan malos en cama y en casa, y a los quandan solos, y a los mozos, y a to er mundo, y lo mismo bebe un chato con uno del pepe que del soe que lo que sea, porque ice qel se debe a Dios y qa la mesa de la iglesia están tos invitaos qes onde shace la paz y tos nos convertimos en hermanos, hijos dun mismo Padre, y que iglesia somos tos, no solo los curas.
A más ha empesao muchas cosas en Alba y no pue endejarlas a medias pairse a Peñaranda, que esvestir un santo pa vestir otro no me paice a mí acertao.
Había pensao mandar esta carta al señor Papa, que es el que más manda, pero digo yo que al ser cosa dun cura, basta con mandarla al Obispo, que es como el coronel de los curas en Salamanca. Si fuera pa defenderle a uzté se la mandaba al señor Papa, pero como es pa que shaga justisia con el señor Lauren, digo yo que un Obispo es sufisiente.
Reso a Dios pa que linspire a uzté y deje al señor Lauren ande está, questá mu bien puesto y tie mucho qhacer y mucho cariño e la gente.
Mespido duzté señor Obispo, que Dios le dé mucha salú, y que deje al cura señor Lauren en Alba, ande está, questá mu bien puesto y no son güenos los remiendos.
Ezte que loes,
Un parroquiano.

16 comentarios:

  1. Es más bien una parroquiana teatrera que no pierde ocasión de promocionar esas dotes teatrales de las que auiere presumir pero no puede.

    ResponderEliminar
  2. Pues si es una tratrera, que lista es

    ResponderEliminar
  3. Buenos días, Gerardo Nieto:

    Pensaba que era una noticia de comienzo del siglo pasado. Ya veo que es de ahora.
    Si todo el mundo escribiera cartas como el 'Parroquiano', y dejara constancia -con sinceridad- de los hechos que afectan a lo mejor para todos, y defendiendo a la gente que trabaja por los demás, el mundo iría mejor.
    El cura debe quedarse, si es deseo de él y de su pueblo; aunque parece que entra en la política de los pastores de su grey trasladar a sus sacerdotes, como si quisieran evitar que se encariñen demasiado con sus fieles.

    Saludos
    P.D.: Me pregunto: ¿Por qué siempre son “Anónimos” los comunicantes de esas tierras?

    ResponderEliminar
  4. No. El cura no debe quedarse si es deseo de su obispo, a quien debe obediencia. La misma obediencia que él mismo aceptó de manera libre y consciente.

    ResponderEliminar
  5. Buenas tardes, Gerardo Nieto:

    Se me ocurre para el anterior comentarista Anónimo:
    ¿Por qué no intentamos convertir un poco en cielo, este valle de lágrimas?
    ¿Siempre va a ser obediencia ciega? ¿También los obispos son infalibles?
    Pues, no.

    Saludos.

    ResponderEliminar
  6. Perdóneme, Gelu, pero no estoy de acuerdo. Igual que cualquier trabajador obedece a su jefe, los sacerdotes tienen de jefe al Obispo. Además, tienen voto de Obediencia, Castidad y Pobreza. Cuando se ordenan sacerdotes ya saben a qué se exponen. De todas formas, todo esto, me parece una cacicada bien grande. Le conozco poco, pero sólo nos ha saludado una vez, y porque iba con personas de la Diócesis. Qué le vaya muy bien, D. Lauren Sevillano.
    Un saludo.

    ResponderEliminar
  7. Gelu, déjese de obediencia ciega... no es cuestión de eso, sino de respetar que el obispo ha organizado de otro modo las parroquias y sus motivos tendrá y se los habrá comentado al nuevo párroco de Peñaranda (por qué no le preguntas a Lauren qué motivos le ha dado el obispo, porque los tiene). No es el único cambio en la diócesis. Claro que a la gente no nos gustan que nos cambien a los responsables si estamos a gusto con ellos (llámese ayuntamiento, parroquia o el que llama a todos para quedar con los amigos) pero la diócesis, tal y como está de curas, ha tenido que mover diferentes fichas para cubrir vacantes y que se puedan atender bien todos los pueblos.Y sigo diciendo lo mismo: él aceptó de manera libre la obediencia a su superior, que es el obispo, aunque a veces no la comparta o no la entienda.

    ResponderEliminar
  8. Que personaje es ese que esta todo el día con la puta obediencia... lo mismo tu no obedeciste ni a tus padres.. que mal te ha echo Lauren. ?

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Queda bien claro quién soy. Si no me conoces, mejor, personajillos como tú me dan mucho asquito. Estoy acostumbrada a tratar con gente educada, respetuosa y con una gran cultura. Fíjate si obedecí a mis padres, que mi madre ha estado en mi casa 14 años, no como lo que hacéis en Alba de Tormes, llevar a los padres a meses o a Residencias. ¡Penoso! Te escondes bajo el anonimato. ¡De pena! A mí Lauren no me ha hecho nada. Me casé con un religioso y sé muy bien, qué la OBEDICENCIA ES UN VOTO QUE HAY QUE CUMPLIR, LISTO. Nací en Alba de Tormes y no reconozco al pueblo. Está lleno de mal educados, amenazantes, ignorantes y gente que se cree con derecho a meterse en la vida de los demás. Salid ya del agujero de la ignorancia. La ignorancia IMPLICA MALDAD. Me da igual que me contestes, no te voy a responder, tengo otras cosas más importantes que hacer. ¡Ah! Yo he sido amenazada, insultada, el otro día yendo de paseo y todavía no sé por qué. Te digo una cosita. No nos metemos con nadie. "VIVIR Y DEJAR VIVIR" ES NUESTRO LEMA. Que te vaya bonito, ANÓNIMO 8.

      Eliminar
  9. Buenas noches, Asun Amada Libertad:

    No hay nada que perdonar, cuando -de buena fe- se expresa el pensamiento.
    La opinión, con un buen razonamiento, se puede cambiar..
    El citado sacerdote, parece que tiene el reconocimiento a su labor, y el cariño de sus feligreses. Como mínimo tiene que estar feliz, pues no todos los trabajadores tienen esa maravillosa recompensa.

    Saludos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias, Penélope Gelu. En las respuestas, se nota la educación de las personas.
      Un gran saludo.
      Asun

      Eliminar
  10. Señor Anónimo, de las 20,05:

    Desde luego que el Señor Obispo tendrá sus razones, y se las habrá comentado al sacerdote.
    Es la primera noticia que tengo sobre este tema, como he escrito en el primer comentario.
    El sacerdocio es un apostolado. Y una importantísima elección de vida, con unas condiciones que se aceptan y se deben cumplir.
    Parece que el Sr. Lauren se ha ganado el aprecio de los fieles de su parroquia.
    En fin. Que el Prelado, en esta ocasión como en todas, reciba la inspiración divina y aquí Paz y después gloria.

    Saludos.

    ResponderEliminar
  11. Por cierto, Gerardo Nieto Arias, gracias por tu página "Entre el Tormes y Butarque", Es buena, coherente y objetiva. La mejor de Alba de Tormes.
    Un gran saludo.
    Asun y Juan Soto

    ResponderEliminar
  12. El Obispo tendría que escuchar al pueblo.

    ResponderEliminar
  13. Cinco estrofas manriqueñas sui géneris con versos de cabo roto:

    Caro Lauren, no te va,
    que esta comarca te ado,
    buen amí.
    No dejes estas mura
    ni a la Santa Fundado.
    ¡Este Obis…!
    Que lo repiense don Car,
    recapacite el prela,
    ¡cuántas fir!
    Que no debe ser de car
    el alma, sería ela
    y no humil.
    Mire que Alba es una Vi
    que sabe guardar lo su
    a capri,
    y una de sus maravi
    es Lauren a quien asu
    como a un hi.
    Como insista usted en sus tre
    del traslado a Peñaran…
    tararí.
    El pueblo que a “to” se atre,
    sin miramientos del ran…
    ¡ay Dios mí…!
    Pueden sacarle canta
    con música de copli,
    diverti,
    los fieles dar la espanta…
    ¿Y a esto qué dice Escami?
    ¿El no opi...?

    ResponderEliminar
  14. Al final el Sr. Obispo hizo lo que tenía que hacer, los que cogieron firmas hicieron el ridiculo y el Ayuntamiento la cabra por coger firmas tambien.

    ResponderEliminar

Las opiniones aquí reflejadas corresponden a los comentaristas y no representan, necesariamente, las del autor de Entre el Tormes y Butarque, quien se reserva el derecho a eliminar aquellos comentarios que considere inadecuados, bien por utilizar un lenguaje indecoroso, emplear descalificaciones personales, ser repetitivos o introducir argumentos al margen del tema de debate.

En caso de que no desee revelar su verdadera identidad se sugiere que utilice un alias o nombre ficticio, lo que agilizará el debate y permitirá identificar claramente la autoria de las opiniones que quieran ser rebatidas o corroboradas por otros comentaristas.